instantes

Se hace urgente que vivamos cada instante con atención y pasión. Y que vivamos cada instante como si fuera el último, que disfrutemos con los nuestros cada día como si fuera el último; no nos ahorremos ni los “te amo”, ni los abrazos, ni los besos, ni las llamadas, ni las visitas, ni los encuentros. A veces nos volvemos demasiado “cositeros” con éstos, y realmente no vale la pena reservárselos.

¿Realmente sabemos cuánto tiempo nos queda?, ¿Realmente estas viviendo la vida que quieres vivir?, ¿Realmente estas compartiendo con las personas que amas y, con igual importancia, con las personas que te aman?, una cosa es estar con las personas que tu amas, pero debes asegurarte que no sean relaciones tóxicas, no te estanques en el deseo, en los apegos, en los “tal vez”; comparte tu tiempo con personas que te inviten a crecer, a mejorar, que te apoyen y te soporten. ¿En este momento de tu vida puedes decir que viviste tranquilo y en paz (no hablemos de felicidad)?

Y ¿Porque digo que no hablemos de felicidad? Pues la felicidad no es un instante, ni un momento. La felicidad es el fin ultimo del ser humano, por lo que el último día de nuestras vidas, podremos decir si fuimos o no felices.

Basta con compartir momentos de calidad con las personas, con demostrar cuan importantes son para nosotros. No peleemos por cosas efímeras, por problemas que tienen solución. Tomemos la vida con calma, con tranquilidad, con paz, dejando fluir los momentos. No sabemos nunca cuando es el último día de nosotros. ¿Saliste hoy enojado con tu pareja/padres/hermanos/hijos de tu casa? ¿Y si no regresas? ¿Y si esa palabra que les dijiste antes de salir, o aquella que callaste, fue la ultima que iban a escuchar, qué harías?

Solo tenemos una oportunidad en esta vida, aprovechémosla, vivámosla, gocémosla.

Antes de decir una palabra que pueda herir a alguien piensa en cómo te sentirías tu y en qué pasaría si esa fuera tu última palabra, ¿te arrepentirías de decirla?

La vida está llena de momentos neutros, quien finalmente le da el significado somos nosotros mismos. Tomemos lo positivo de todo, si tenemos un momento “bueno”, recordémoslo; si algo “malo” te sucedió toma un aprendizaje de este y veras que no hay nada “malo” en las cosas, es solo la perspectiva y el significado que le damos.

Recuerden que la vida es un instante y solo tenemos una.